Durante 2019 en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires 8 de 10 femicidios fueron cometidos en contexto de violencia intrafamiliar o de pareja.
La Unidad Fiscal Especializada en Violencia contra las Mujeres (UFEM) analizó 30 causas de muertes violentas de mujeres, de las cuales 18 corresponden a homicidios dolosos. La mayoría tiene indicadores de violencia de género.
Según el informe difundido por el Ministerio Público Fiscal, la vivienda compartida por la víctima y el autor del crimen es el lugar donde con mayor frecuencia se registran estos casos.
En 7 de 10 había relación de pareja entre autor y víctima y 2 casos comprendieron a mujeres asesinadas por sus hijos. En 6 de 10 había antecedentes de violencia de género. La mitad fue cometido frente a testigos directos. La muerte por apuñalamiento (3 de 10) es la causa de muerte que cuenta más casos entre los femicidios, seguida por el estrangulamiento (2 de 10).
La mayoría de las víctimas tenía entre 30 y 39 años y el promedio entre todas es de 47 años. En la capital del país, los femicidios y el transfemicidio/travesticidio representan el 56 por ciento de los homicidios dolosos de mujeres.
Los datos corresponden al informe sobre homicidios dolosos de mujeres, femicidios, transfemicidios y travesticidios en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires en 2019, elaborado por el área de Análisis Criminal y Planificación de la Unidad Fiscal Especializada en Violencia contra las Mujeres (UFEM), en cumplimiento de las misiones establecidas en la Resolución PGN 427/2016.
El informe, que llegó a su quinta edición anual, tiene como objetivo producir información criminal que sirva de insumo para el desarrollo de las estrategias de persecución penal en materia de criminalidad de género.
El número de femicidios reporta un aumento respecto del año 2018, cuando se ubicó en el 47% sobre el total, al mismo tiempo que registra un peso similar al de los años 2015 (59%) y 2017 (54%).
En tanto, en 2016 “los femicidios alcanzaron el pico máximo del periodo 2015-2019, representando el 72% del total de los homicidios dolosos de mujeres en la ciudad de Buenos Aires”.
La integralidad de los datos sobre el quinquenio 2015-2019 indica que “el peso de los femicidios y transfemicidios/travesticidios representa en promedio el 57% de los casos de los homicidios dolosos sobre mujeres cis, mujeres trans y travestis en CABA”.
Para la confección del informe, la UFEM -a cargo de la fiscal federal Mariela Labozzetta- analizó un total de 30 casos de presuntas muertes violentas de mujeres en la ciudad de Buenos Aires ocurridas durante 2019, a los que se les efectuó seguimiento con las fiscalías y los juzgados en donde tramitaron.
De las 18 muertes identificadas, 10 fueron calificadas como femicidios por la UFEM. “En nueve causas se investiga el asesinato de una mujer y en una se investiga un transfemicidio/travesticidio. En cuanto a la cantidad de víctimas, una de las mujeres fue asesinada en el mismo hecho junto a un varón, cuyo homicidio es clasificado como femicidio vinculado [es decir, el homicidio de un familiar de la víctima de violencia de género con el objeto de causarle dolor].
Respecto a los autores, nueve causas tramitan con autores identificados, no registrándose casos de más de un autor por hecho. Al momento del cierre del relevamiento, la causa por transfemicidio/travesticidio no tenía autor identificado”, indica el informe.
El informe diferencia los femicidios y trasmfemicidios/travesticidios de la totalidad de homicidios dolosos de mujeres. Para ello, la UFEM partió de la definición de femicidio elaborada por el Mecanismo de Seguimiento de la Convención de Belém do Pará (MESECVI) en la “Declaración sobre el Femicidio” de 2008, que lo caracteriza como “la muerte violenta de mujeres por razones de género, ya sea que tenga lugar dentro de la familia, unidad doméstica o en cualquier otra relación interpersonal, en la comunidad, por parte de cualquier persona, o que sea perpetrada o tolerada por el Estado y sus agentes, por acción u omisión”.
La definición adoptada para abordar el travesticidio/transfemicidio proviene de un trabajo publicado en el Boletín del Observatorio de Género de la Ciudad de Buenos Aires, que entiende que “es la expresión más visible y final de una cadena de violencias estructurales que responden a un sistema cultural, social, político y económico vertebrado por la división binaria excluyente entre los géneros. Este sistema recibe el nombre de cisexismo”.