El 4 de julio de 2020, en plena pandemia por el coronavirus, al menos cuatro personas dañaron vagone del Ferrocarril Sarmiento, en los talleres de la estación de Haedo, partido de Morón, provincia de Buenos Aires. Pintaron graffitis. La reparación fue  valuada en 96.000 pesos

Uno de los protagonistas del hecho quedó identificado y terminó procesado a la espera del juicio acusado del delito de “daño agravado, por haber sido ejecutado en bienes de uso público”, con una pena de hasta 4 años de prisión.

Se lo había embargado por un millón de pesos ($1.000.000), pero la Cámara Federal de San Martín, al confirmar el procesamiento, decidió rebajar sensiblemente ese monto y lo fijó en 300 mil pesos.

Qué pasó

La investigación ubicó al acusado al momento y en el lugar del hecho. Así quedó constatado con las declaraciones testimoniales que prestaron tanto un empleado de seguridad, como del personal preventor que participó de la emergencia.

Para la Justicia no había dudas de la participación del acusado. Tenía manchas de pintura en sus manos y en su vestimenta, y una mochila con varias latas de pintura.

 “No pueden soslayarse las circunstancias en las que fue identificado y de las cuales dan cuenta las fotografías incorporadas (poseía manchas de pintura en las manos y en las prendas de vestir)”

“En su poder, se le incautó una mochila gris, con cuatro latas de pintura sintética en aerosol de la marca Kuwait (dos de color negro, una de color naranja y la última de color amarillo), un block de cartulina de hoja lisa con algunos dibujos, una riñonera de color negro con la inscripción de la marca Achohed Gud, un guante de lana, varios reguladores para los aerosoles y un tupper de plástico conteniendo en su interior pintura de color gris”, dice el fallo.

“Todos estos elementos, valorados en forma conjunta, permiten tener por acreditada, con los límites convictivos propios de este segmento del proceso, la participación del encausado en el hecho y permiten desvirtuar –contrariamente a lo alegado por la defensa- el descargo del imputado acerca de su ajenidad en el hecho y su presencia circunstancial en el lugar”, confirmó la Cámara.

Defensa

La defensa hizo otro planteo: Que no existió alteración de la esencia o sustancia de la cosa ya que se encontraba en desuso y en un lugar de fácil acceso.

Los jueces rechazaron también esa postura al argumentar que “la formación férrea dañada no sólo se encontraba en un predio del ferrocarril que no es de acceso libre, sino que además si estuviesen en esa situación de aparente desuso, nada obsta a que puedan ser reutilizados, con lo que desde este aspecto la vulneración al bien jurídico protegido -la incolumidad de un bien de uso público- se encuentra constatada”.

Sin embargo, los camaristas Marcos Morán y Marcelo Fernández consideraron que el monto del embargo ordenado “debe adecuarse a las circunstancias del proceso…por lo que habrá de experimentar una sensible disminución fijándolo, en definitiva, en la suma de trescientos mil pesos ($ 300.000)”.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.