En Argentina, las fiscales mujeres no alcanzamos el 30% del total de fiscales nacionales y federales. Ninguna de nosotras actúa como fiscal ante una cámara de apelaciones federal. Una vez más, necesitamos más mujeres para una administración de justicia más igualitaria
Según el último mapa de género publicado por la Dirección de Políticas de Género del MPF, a cargo de la Dra. Romina Pzellinsky, en nuestro organismo la representación de las mujeres en puestos jerárquicos se encuentra muy reducida. Si bien en las jerarquías medias de la institución, las funcionarias ocupan más del 50% de los cargos; la situación es muy diferente para los cargos de fiscales.
Así, mientras que sólo hay un 26% por ciento de fiscalas de primera instancia (72 sobre un total de 272), la situación es aún más desigual en los cargos de fiscales generales, en donde sólo 15 mujeres ocupan ese puesto y todas lo hacen frente a tribunales orales, es decir, en instancia de juicio oral, pero ninguna en instancia de revisión (15 sobre un total de 85 puestos).
Estas cifras implican trabajar en distintos planos para lograr la igualdad en los puestos de toma de decisión del organismo. Por un lado, tenemos que fomentar que más mujeres se anoten en los concursos públicos de antecedentes y eso implica dialogar y discutir acerca de qué tipo de fiscales queremos, pero también implica reconocer la enorme desigualdad actual en la distribución de las tareas de cuidado.
El liderazgo de las y los fiscales del código acusatorio debe estar ligado a los más modernos objetivos del proceso penal federal que son la resolución rápida y pacífica de los conflictos sociales y la fuerte especialización para resolver los casos de criminalidad organizada, graves violaciones a los derechos humanos y delito complejo en general, con la mirada puesta en la víctima y respetando a todos quienes están involucrados en estos conflictos.
Por otro lado, se necesitan herramientas positivas para lograr revertir estas desigualdades, lograr cupo en las ternas y que más mujeres sean elegidas por las autoridades políticas, al integrar esas ternas.
Hace exactamente un año, en el marco del primer encuentro de mujeres de la AFFUN, un grupo de fiscales mujeres nos comprometimos a promover institucionalmente las mejoras reglamentarias y legales que pudieran hacer falta para que cada vez seamos más mujeres fiscales.