Intentó sacar un crédito con documento falso en el BBVA Francés. Seis años después, acaban de confirmar su procesamiento.
Nunca llegó a obtener los 118.000 pesos que pidió, pero igual enfrentará un juicio oral.
Cómo se descubrió
En 2015, el ahora acusado se presentó en una sucursal del BBVA Francés sobre avenida Cabildo. Pidió un préstamo personal de poco más de 100.000 pesos. Para ello debía cumplir con todos los requisitos: Apertura de cuenta, control crediticio, entre otros.
El trámite parecía encaminado.
Pero cuando avanzó en los carriles administrativos, un empleado del sector Riesgo y Fraudes Bancarios advirtió ciertas irregularidades en la fotocopia del DNI que llegó a sus manos.
Resultó que el documento era falso: Estaba la foto del cliente pero el nombre y demás datos eran de otra persona.
Hecha la denuncia penal, llegó el procesamiento.
La defensa: Se argumentó que si un empleado del Banco se había dado cuenta del intento de engaño, la imitación era tan burda que no era delito.
La sentencia: La Cámara Federal de la ciudad de Buenos Aires confirmó el procesamiento y descartó este argumento.
Engañar al “hombre común”
Que el empleado “haya advertido ciertas irregularidades en el citado documento no conlleva a restarle idoneidad al mismo con los alcances desincriminantes que pretende la defensa”.
Además, “el resultado del análisis y observación que ha efectuado el Tribunal corrobora la imposibilidad de considerar burda su confección”, concluyeron los camaristas Eduardo Farah, Martín Irurzun y Roberto Boico.
Para que haya delito “es necesario que de la falsificación efectuada surja la posibilidad de perjuicio, con lo cual la adulteración de un documento que presenta un aspecto burdo se encuentra al margen de la tipicidad”, aceptó en su voto el juez Irurzun. Pero este punto particular no se da en este caso.
La capacidad de engaño de la falsificación “no debe conciliarse con la apreciación que puede efectuar el individuo experto, o el estudio detenido que permite descubrir las deficiencias y que no se compadece con el tiempo y examen habitual que se dedica a la verificación del documento, sino con la del hombre común que intenta ser inducido a error”.
Muchasí veces la justicia dice que por ser delitos burdos como los llaman no constituyen delito.creo que prima,la intencion del engaño o fraude y esos son delitos.