Un hombre intentó pagar un sachet de leche y un paquete de papas fritas con un billete falso de 1000 pesos y terminó con una causa judicial abierta.
El 8 de abril de 2020, en el momento más rígido del aislamiento social preventivo y obligatorio por el Covid 19, llegó a un local de una conocida cadena de supermercados para realizar la compra.
Pero la cajera notó que algo no estaba bien con el billete. Rechazó el pago y no entregó la mercadería.
La empleada avisó a la encargada del local.
Desde el supermercado se alertó a policías que custodiaban un banco cercano. Un móvil policial interceptó al comprador y un acompañante a pocas cuadras del lugar.
En su poder se encontraron cinco billetes falsos de 1000 pesos, algunos escondidos en la botamanga de su pantalón
El acusado quedó procesado por “haber intentado poner en circulación” ese dinero.
Engaño al hombre común
En su escrito de apelación, la defensa sostuvo que el medio utilizado resultó ser “burdo y por lo tanto inidóneo para sus fines”. Es decir que la falsificación era tan mala que no pudo ser delito porque no se podía engañar a nadie. De hecho, la cajera se dio cuenta.
Sin embargo, la Cámara Federal de la ciudad de Buenos Aires no tuvo el mismo criterio.
El billete “por sus características particulares y detalles, podría resultar apto para inducir a engaño a un hombre común, más allá de que su falsedad haya sido detectada por la persona a quien se los entregó”.
“Al respecto, no podemos afirmar que el medio resultó por sí mismo inidóneo, sino que fue la actitud prudente de la persona que trabajaba de cajera en el supermercado la que logró -en virtud de la labor desempeñada- desvirtuar la artimaña desplegada”
En otros fallos similares, los jueces Pablo Bertuzzi y Leopoldo Bruglia sostuvieron que “la virtualidad o idoneidad del instrumento falsificado para vulnerar el bien jurídico tutelado, debe analizarse teniendo en cuenta la apreciación que en el momento puede efectuar el hombre común que es a quien se intenta inducir a error”.
No cuenta la del experto “que cuenta con los medios adecuados para descubrir sus deficiencias”
El acusado quedó así con procesamiento confirmado por “expendio de moneda falsa en grado de tentativa”.