por Vanesa Ferrazzuolo

Eso vimos ayer, una rebelde, Thelma, una mujer, que con suma valentía relató el capítulo más doloroso que seguramente le ha tocado vivir.  La reseña de lo sucedido pone en consideración cuántas cosas son aceptadas por la sociedad, cuántas cosas son naturalizadas por los distintos colectivos, y cuántas desde ya hace un tiempo vienen poniéndose en crisis.  Su relato nos debiera interpelar a todos como seres humanos.

De igual manera, en el mismo momento en que Thelma rompió el silencio, una de las miradas centrales se posó en la justicia, en qué hace o no hace, en cómo se hace, en las variadas peripecias que debe transitar una mujer que desea realizar una denuncia.

Este año, hace poco más de un mes, el Consejo de la Magistratura de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires inauguró el Centro de Justicia de la Mujer, que se encuentra ubicado en La Boca, en la calle Pedro de Mendoza 2689. El objetivo del Centro, desde un inicio, fue el de posibilitar en un único espacio, la realización del trámite completo que implica formalizar una denuncia.

En este contexto se advirtió que solo el hecho de decidir realizar una denuncia penal es, primero, un proceso interno de cada persona, y recién luego un proceso formal.

Este último se inicia con el relato de los hechos ante un funcionario público, y también suele iniciar ahí el recorrido de esta mujer, que lleva consigo el dolor de lo ocurrido, el desgate emocional de la decisión que tomó y el desconcierto de que pasos seguir y a donde ir.

Desde esa mirada, el Centro de Justicia de la Mujer,  se transformó en el primer espacio pensado para abordar los casos de violencia contra las mujeres, en un solo lugar, al mismo tiempo y de manera conjunta entre distintos organismos judiciales y gubernamentales.

En el Centro, un equipo de abogados recibe a la persona que viene a realizar la denuncia y la orienta conforme los pasos a seguir. En este lugar la Fiscalía toma la denuncia, se realiza el informe interdisciplinario de riesgo en todos los casos, se tornan efectivas las medidas de seguridad (entrega de botón antipánico) de corresponder y se realizan las pericias medico legales, en situaciones en donde el hecho denunciado presente lesiones físicas.  En el mismo centro y como parte de la orientación prevista se realizan distintas derivaciones y contactos, para ser asistida y derivada por la Dirección Mujer de GCBA, o por el equipo de Género para el acompañamiento en situaciones de vulnerabilidad habitacional de la Defensoría General, y se le da intervención a la Asesora Tutelar cuando sean víctimas del hecho denunciado niñas, niños o adolescentes.  Finalmente el equipo de orientación informa sobre los pasos seguir, y si debe o no realizar algún otro trámite y para los casos de mayor gravedad ofrece patrocinio jurídico gratuito.

El Centro de Justicia de la Mujer pertenece al Consejo de la Magistratura de la Ciudad, y tienen allí su asiento la Oficina de la Mujer y Violencia Domestica (OMVD), la Dirección de Medicina Forense y la Oficina de Asesoramiento Jurídico a la Comunidad (AJUC), participan del Centro, el Ministerio Público Fiscal,  el Ministerio de Justicia a través de la División Víctimas de Violencia de Género y de Hábitat y Desarrollo Humano a través de la Dirección Gral. de Mujer con personal presente en el lugar y el Ministerio Público Tutelar y de la Defensa a través de enlaces directos.

El Centro tiene como objetivo principal dar un salto de calidad en la atención, abordaje y derivación de casos como estos.  Acotar lo desgastante del trámite y lograr una Justicia más amena, más cercana y más accesible, para que una denuncia no requiera de un acto de rebeldía sino del ejercicio de un derecho

 

 

 

 

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